Hace un tiempo atrás, a la hora de armar un currículum, se pensaba únicamente en la experiencia laboral y en la formación profesional. Pero, hoy en día, esto pareciera no ser suficiente. Los empleadores también quieren saber, desde el texto, algo más respecto a los candidatos que acercan sus currículums.
En la actualidad, la competencia en el mercado laboral es muy amplia. Esto aumenta en los momentos de crisis. Por eso, es importante acatar diferentes estrategias para poder diferenciarse de los demás a la hora de mandar un currículum y tener mayores posibilidades de que la empresa lo contacte. Se trata, en definitiva, de añadir valor al currículum. Este valor son nuestras aptitudes y nuestras habilidades. Es lo que va a hacer que nuestro desempeño en el puesto sea excelente y que den a la empresa la confianza que necesita.
¿Qué aptitudes poner en un currículum?
Pero ¿qué aptitudes deberíamos poner? Ya hemos visto que son importantes en los currículums de la actualidad, pero poco sabemos respecto a cuáles y cómo colocarlas. En general, las aptitudes que más valoran los empleadores actuales son:
- Trabajo en equipo
- Capacidad de adaptarse
- Creatividad
- Comunicación
- Resolución de problemas
- Liderazgo
- Pensamiento crítico
- Organización
- Toma de decisiones
- Manejo de idiomas
- Proactividad
- Competencias digitales
- Responsabilidad
Claro está que ciertas aptitudes van a tener más importancia que otras en función del tipo de trabajo y el puesto al que se aspire. En este sentido, podemos pensar en un ejemplo: trabajo de diseño gráfico. En este, las competencias digitales, la toma de decisiones, la responsabilidad en las entregas y la creatividad van a ser sumamente importantes. También es probable que los idiomas sean interesantes puesto a que muchas herramientas y plataformas se encuentra en inglés. Al ser un empleo que muchas veces puede hacerse con modalidad home office, la capacidad de organizarse también será relevante.
¿Cómo redactar aptitudes?
A la hora de incorporar ciertas aptitudes en el currículum vitae, hay distintas formas de hacerlo. A continuación, vamos a escribir un ejemplo de cómo quedaría este apartando bien armado:
“Diseñador web con 5 años de experiencia en empresas, desarrollando diseños creativos y responsive, generando estrategias que mejoren la presentación y usabilidad de los sitios web, con un porcentaje de éxito del 96%. Capacidad de escucha y objetividad como valores en mi desempeño profesional, buscando trabajar en esta empresa para aportar a diseños que aumenten la eficacia de las plataformas y generen un aumento en el flujo de clientes”.