Consejos para descubrir tu vocación

Hace tiempo, las sociedades se manejaban de manera muy diferente en lo que refiere al mercado laboral. Era frecuente que, dentro de una familia, los hijos siguieran con los negocios o profesiones familiares. Además, al haber menos opciones laborales, no quedaba mucho espacio para pensar qué es lo que se quiere ser y hacer. Pero, hoy en día, eso ha cambiado.

En la actualidad, una de las preguntas más frecuentes que las personas tienden a hacerse tiene que ver con la vocación. Es decir, con qué es lo que se quiere ser y qué es lo que se quiere hacer para vivir; a qué dedicarse. Lo primero que hay que decir es que son muy pocas, en realidad, las personas que saben desde la adolescencia lo que van a ser posteriormente y siguen ese camino. Además, estamos acostumbrados a escuchar que se trata de un camino lineal, donde una persona progresa en línea recta respecto de una carrera y una elección.

Para calmar las ansias, podemos decir que esto no es cierto. hoy en día, la pregunta respecto de la vocación y los intereses aparece muchas veces a lo largo de la vida de una persona y va produciendo cambios. Debemos tener en cuenta que las personas no somos siempre las mismas, vamos cambiando, como también van cambiando nuestros intereses y objetivos. Además, las distintas decisiones que tomamos y experiencias que atravesamos van abriendo nuevas puertas, por lo que la linealidad del camino en la profesión no es algo que se de en la mayor parte de los casos.

El mito del trabajo soñado

Una frase que escuchamos mucho y que aparece con frecuencia en las redes sociales es: “Encontrá el trabajo que te guste y no tendrás que trabajar un día más en tu vida”. El riesgo de este tipo de afirmaciones tiene que ver con que contienen un muy alto grado de estrés. A las personas se les añade la necesidad de encontrar ese trabajo perfecto, el soñado, el que no les genere ningún tipo de duda o malestar. Pero eso es algo muy difícil de lograr.

Así que el primer paso es desprenderse de estas exigencias de película que distan de la vida real. Encontrar la vocación es algo que lleva tiempo y aprendizajes. Pero, además, una persona puede tener distintas vocaciones a lo largo de la vida, a la vez que puede tener distintos intereses y vocaciones de manera simultánea. A continuación, veremos algunas formas de encontrar lo que más se parezca a lo que conocemos como vocación.

Animarse a cambiar de ruta

El modelo de vida hegemónico nos ha enseñado que debemos elegir durante la adolescencia aquello que queremos ser, estudiarlo o comenzar a relacionarnos con el tema e ir avanzando progresivamente en ese camino. Partiendo de ese punto, cambiar de rumbo puede ser visto como un fracaso. Pero eso no es cierto. Continuar un mismo camino solamente por las presiones sociales puede llevar a mayores frustraciones y a un malestar generalizado con el paso del tiempo. Por eso, el primer paso es permitirse cambiar, no pensarse como atado a una profesión el resto de la vida y abrirse a las posibilidades de cambio que puedan aparecer.

Realizar exámenes vocacionales

Son muchas las personas, en la actualidad, que acuden a exámenes vocacionales cuando están buscando una profesión. De hecho, en muchos casos, estos se llevan a cabo en los colegios, para que los jóvenes puedan tener más herramientas a la hora de elegir una carrera universitaria. Si no se tiene idea de qué es lo que se quiere hacer y se busca un poco de ayuda, esta herramienta puede ser muy útil.

Sin embargo, es muy importante aclarar que los resultados de estos exámenes no necesariamente son una imposición. Es decir, si a una persona no le interesa la profesión que el examen sugirió, no es necesario seguirla. Siempre que se pueda, el horizonte tiene que estar lo más vinculado posible a los propios intereses.

Contactarse con profesionales

Cuando se sabe más o menos qué es lo que se quiere hacer o en qué tipo de ámbito se quiere trabajar, una gran ayuda es hablar con profesionales vinculados al sector. Por ejemplo, si se quiere trabajar en publicidad, hablar con personas que actualmente trabajen en el rubro. Esto no sólo ayudará a conocer mejor el funcionamiento y los modos convencionales de la profesión, sino que también permitirá brindar un panorama más particular de qué es lo que se podría hacer. Además, es una manera de acceder a información respecto a cómo y dónde buscar trabajo para esa profesión, cómo introducirse, qué es lo que conviene estudiar, si es importante hacer preparaciones adicionales, entre otras cosas.

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